En este mundo nuestro fulguran algunas estrellas que, en esta noche eterna de nuestra vida, iluminan el camino del resto de los mortales... Nacieron para ser genios y estimular el intelecto y la curiosidad vital de quienes nacimos para admirarlos... Entre ellos está mi queridísimo compañero Federico. Un hombre con unas ansias de aprender y de enseñar, con una capacidad de trabajar e investigar, que se convierte en modelo y referente de los que tenemos la suerte de compartir con él cada jornada laboral.
No creo que sus alumnos alcancen a comprender en este momento la suerte inmensa que tienen. Es posible que dentro de quince o veinte años se den cuenta de que su vocación y su vida quedaron marcadas por el sello indeleble de un profesor excepcional.
Hace dos cursos crió con su alumnado reinas de hormigas que fueron origen de sus respectivas colonias. Recuerdo el día en el que llegando al departamento de ciencias del colegio, una alumna salía llorando mientras, a duras penas, se le entendía decir "se ha muerto Lola".... Preocupado pregunté a sus compañeras quién era "Lola" y resultó ser la reina a la que le había tocado cuidar y alimentar... El curso pasado, el proyecto fue un mariposario que impactó en la Feria de las Ciencias de Sevilla. Pero nada comparable al impacto del proyecto de este curso, en el que ha desarrollado con sus niños y niñas un insectario con "maestros del camuflaje" entre los que se encuentran "insectos hoja", "palo" y "corteza". Una maravilla que me tiene absolutamente alucinado desde el día en el que se inició... Veo a mi compañero Federico cuidándolos a diario, veo a su alumnado encargándose de la limpieza día sí día no, pero sobre todo me veo a mí mismo contemplándolos durante horas cuando nadie me ve. Y hay que ver lo que me han hecho reflexionar...
Estos bichos han sobrevivido millones y millones de años haciéndose pasar por lo que no son. Los insectos palo permanecen inmóviles mientras cuelgan de una ramita a la que imitan en textura y color. Los insectos hoja "bailan" cuando cualquier cosa mueve levemente su terrario; simulando ser hojas mecidas por el viento. Incluso llegan a imitar las manchas marrones de las hojas y los agujeros generados por otros insectos que se alimentan de las plantas en las que habitan.
Y pienso en mí...
Creo que me hubiese ido bastante mejor en la vida si me hubiese sabido mimetizar con el entorno. Probablemente me hubiese llevado menos tortas, menos malos tragos...
Creo que nunca podría haber formado parte de los bichos de Federico, porque si me hubiese tocado ser "insecto hoja"; hubiese sido azul cobalto. Si "insecto palo"; amarillo chillón. Si "insecto corteza"; rosa chicle...
Alucinante insecto hoja criado por mi compañero Federico