Dicen que todo en la vida es según el color del cristal con que se mire... Y no hay cosa más cierta.
Millones de españoles nos debatimos a esta hora entre la decepción y el cabreo por ver derrotada a nuestra selección en el primer partido del Mundial 2010. La todopoderosísima "Roja" que, cual nueva Armada Invencible, la ha cagado a las primeras de cambio y ha acabado "Roja chillona" de vergüenza.
Mientras tanto, mi amigo Juanfran y otros miles de españoles se están acordando de la familia de cada uno de los jugadores porque no les libra ni la caridad de pagar los electrodomésticos que compraron en una magna promoción de la conocida cadena Media Markt. Mi amigo se mudó hace apenas una semana y, aprovechando el estreno de casa, decidió estrenar también televisor LCD. El pobre estaba animoso porque con la selección española de favorita, la propaganda que rezaba "¡Si España lo gana todo, tú también lo ganas todo!", parecía ser una apuesta a caballo ganador... Su gozo en un pozo.
Solo hay una diferencia entre ambas situaciones. Mientras los millones de futboleros seguiremos anhelando que la, ahora humilde, "Roja" gane el próximo partido, ellos ya han perdido toda esperanza.
Como me decía Juanfran en un mensaje hace un ratito... "¡Es que no me ha dado tiempo ni de hacerme ilusiones!"
¡Está clarísimo!... Todo en la vida es según el color del cristal con que se mire...